segunda-feira, 12 de outubro de 2009

De espaldas para el mar...


Generalmente, encontrar petróleo es una tarea ardua, que exige trabajo en equipo de ingenieros y geocientíficos en la localización de los yacimientos. Una actividad muy importante, en ese tema, es la elaboración de modelos, donde la forma de pensar de esos técnicos es importantísima, pués no es sólo basada en parámetros tecnológicos y si en un pensamiento de tipo abstracto en relación a un pasado muy remoto, de millones de años atrás. Por exemplo, recientemente Brasil anunció la existencia de grandes reservatorios de petróleo profundos en su mar. Pero, los geólogos ya habian avisado sobre esa posibilidad, debido a que la proximidad que existió entre América del Sur y África en el pasado, hace 200 millones de años atrás, evidenciaba la formación de un mar poco profundo entre ellos, donde sería posible la formación de petróleo.



Observando la historia geológica de Panamá, encontramos que hay mucha similaridad con otras partes del mundo, donde existen actualmente grandes campos de petróleo. Sino veamos. Treinta millones de años atrás existía una abertura en lo que hoy es el Istmo de Panamá, que permitía corrientes marítimas comunicantes entre el Pacífico y el Atlántico. Del mismo modo, existía entre África, Asia y Europa el Mar de Tetis, el cual se fué estrechando cada vez más, hasta la colisión entre la India y Asia y la aproximación entre África y Europa. Esas aproximaciones cerraron ese mar de forma definitiva y originó mares cerrados menores como el Mediterráneo, el Negro y el Caspio. Actualmente, donde estaba el Mar de Tetis están los mayores campos petrolíferos del mundo, en países del Oriente Medio como Irak, Irán y Arabia Saudita.



Con el transcurir del tiempo, la temperatura aumentó en el planeta y los océanos adquirieron las características de hoy, con vigorosas corrientes de superficie, aguas frías profundas y aumento de resurgencia de esas corrientes a lo largo de las costas ecuatoriales. Simultaneamente, grandes eventos geológicos acontecieron, como el aislamiento del Mediterráneo, la abertura del Estrecho de Drake y el cierre de los estrechos de Indonesia y Panamá. El enfriamiento de las aguas profundas ocurrió de forma lenta, probablemente como resultado de la formación de montañas y la acumulación de nieve y hielo, por primera vez en la Antártida y más tarde en las latitudes nórdicas. Esto aumentó la captura del dióxido de carbono de la atmósfera y la erosión las rocas surgidas en nuevos sistemas montañosos como los Himalayas, Andes, Alpes, etc. Este acontecimiento incrementó la alcalinidad de los oceános, la deposición de materia orgánica y sedimentos terrígenos en los oceános. Con esto, aumentó la deposición de carbonatos en los mares, que son hoy los grandes reservatórios del Oriente Medio y de los recién descubiertos en Brasil.



Por lo tanto, creo que los panameños debemos parar con esa postura de permanecer de espaldas para el mar, lo que nos fué impuesto en tiempos de la colonia por los españoles. Debemos mirar más para él, pués en él hay riquezas, no solamente del petróleo, pero también pesquera y mineral. Y en Panamá tenemos dos...

Nenhum comentário:

Postar um comentário